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Por Tu Matrimonio

La bendición sorprendente de educar en casa

Escuela en Casa durante Covid-19

Por Verónica López Salgado

Hablar de la familia como iglesia doméstica significa proclamar que el hogar es “la primera escuela de vida cristiana”.[1] Y aunque invariablemente me fascinaba esta expresión – iglesia doméstica – y sé que, como padres de familia somos los principales educadores de nuestro hijo, ¡jamás imaginé que literalmente sería la maestra de mi hijo no solo en la fe, pero también en la escuela secundaria!

La pandemia motivó algunas transiciones drásticas para mi familia: uno de esos cambios fue el comenzar homeschooling – como se conoce en inglés – o educación en el hogar con nuestro hijo Santiago. Después de varios meses de discernimiento, a principios de septiembre de 2020 decidimos darlo de baja de su escuela y comenzar la educación en casa. Nuestro hijo actualmente tiene 13 años y está por terminar el 8vo grado.

Nos dimos a la tarea de empezar una exhaustiva investigación sobre los recursos para la educación en casa, los métodos de enseñanza y aprendizaje y los requisitos que el estado solicita a los padres para poder educar a sus hijos en casa. Finalmente, cuando nos decidimos por un programa escolar a distancia y plan de estudios, debíamos completar cada uno de los requisitos del estado donde vivimos el año pasado – cabe mencionar que cada estado tiene sus exigencias particulares.

Al haber completado todos los pasos necesarios, nos sentimos totalmente preparados para la aventura. ¡O al menos eso creímos! Pues resulta que no alcanzamos a inscribirnos a tiempo y pagar la colegiatura porque aproximadamente 2.500 estudiantes ya se habían inscrito y no había más cupo para nuestro hijo. Aun así, elegimos el currículo de la escuela que más nos agradó: Madre de la Divina Gracia (Mother of Divine Grace por su nombre oficial en inglés) y decidimos que sería yo quien implementaría el programa de estudios, sin apoyo de los maestros o asesores escolares que al habernos inscrito hubiéramos tenido. Sin embargo, algo que sí tuve y agradezco demasiado es haber buscado los consejos de madres con extensa experiencia en homeschooling. Eso me ayudó a saber cómo podía personalizar el programa de estudios de mi hijo de acuerdo con sus necesidades de aprendizaje. Así elegimos complementar el plan de estudios con otros recursos y sustituir algunas clases.

A finales de septiembre, después de haber ordenado los libros necesarios y armar lo que parecía un horario escolar adecuado, comenzamos la escuela en casa/educación en el hogar. Si dijera que todo empezó estupendo y sin complicaciones, estaría mintiendo puesto que el camino no ha sido fácil. Nuestro trayecto no ha estado libre de obstáculos, inhibiciones y un sinfín de cambios en la rutina. Hoy, después de ocho meses y aún con trabajo escolar por completar, puedo decir con total franqueza que la experiencia de enseñar a mi hijo en casa ha merecido la pena en TODO momento. Él, por su parte, piensa lo mismo porque, aunque frecuentemente me pide hacer algo fuera de lo común en nuestro día de escuela, hemos aprendido juntos que la disciplina desde el amor siempre trae buenos resultados.

Para terminar, me gustaría incluir sugerencias, recursos y estrategias que me han servido a mi como maestra de mi hijo durante este año escolar. No sin antes subrayar una frase de san Juan Pablo II que me parece de suma importancia. Existen innumerables estudios afirmando que “ninguna influencia es más formativa de la identidad de las personas que su socialización primaria”.[2] Esta primera socialización sucede precisamente en la esencia de una familia, a la cual san Juan Pablo II nombró “pequeña sociedad” y afirmó, que “la familia es en sí misma una pequeña sociedad, y la existencia de todas las grandes sociedades (nación, estado, Iglesia) depende de ello”.[3] Por esta razón, querido lector, si tú también haces escuela en casa con tus hijos – de cualquier edad –  lo hiciste al principio de la pandemia, o has optado por la educación en casa por un período de tiempo más largo, espero que al leer este artículo comprendas la labor tan fundamental que forjas, realizaste y continuarás haciendo durante la vida de tus hijos que serán parte de la gran sociedad que tú estás formando en tu hogar.

Tres consejos sobre la escuela en casa

  1. Si como yo, la escuela en casa fue una decisión motivada debido a la situación con el Covid-19, ¡ánimo! no estás solo y el mundo entero tuvo que aprender a navegar esta realidad. Si ya tus hijos han regresado a la escuela de ladrillo y cemento, ¡felicidades! por haber hecho tu mejor esfuerzo por enseñar a tus hijos en casa el tiempo que lo hayas hecho. Si tus hijos continúan la escuela en casa no por decisión propia, ¡adelante!, existe una plétora de recursos para ayudarte a seguir. Y si has optado por la escuela en casa por un período de tiempo más largo o permanentemente, ¡enhorabuena!, seguramente has elegido lo que es mejor para tus hijos y familia.
  2. Los padres de familia con amplia experiencia sobre la educación en casa me dijeron que por lo general – sin Covid – el primer año es el más difícil. ¡Ama más, no seas tan duro contigo mismo o con tus hijos! Pues cualquiera que sea tu situación actual, recuerda que la familia es la célula primera y vital que también tiene una función social y política: tus hijos serán en la sociedad el reflejo de lo que viven en casa.
  3. Pide apoyo SIEMPRE que lo necesites, haz preguntas y tómate el tiempo de investigar. Es esencial que tengas una lista integral de otros padres, amigos y familiares que pueden ayudarte o aconsejarte. Únete a un grupo de ayuda para padres en tu ciudad o en redes sociales. Mi papá, por ejemplo – ingeniero químico – es el tutor de álgebra de mi hijo.

Tres sugerencias concretas para la escuela en casa

  1. Asegúrate de conocer cuáles son las expectativas sobre la educación en el hogar del estado en donde vives. Cuál es la ley, requerimientos, etc. Por ejemplo, yo aprendí que los requisitos del estado de Carolina del Norte son mucho más estrictos que los del estado de Mississippi.
  2. Ahorra tiempo en la planeación y compra únicamente los materiales escolares que necesites, imprime lo que sea posible, y organiza todo en carpetas por materia.
  3. Lee con anticipación el material que tus hijos aprenderán o que les ensenarás, esto te ayudará a tener una visión más clara de cómo presentárselos.

Recursos para la escuela en casa

  1. Nosotros escogimos la escuela Madre de la Divina Gracia, que es un programa de educación a distancia que ayuda a los padres a implementar una educación clásica católica en su hogar. Encuentra más información aquí: Mother of Divine Grace School.
  2. Nosotros quisimos un programa y plan de estudio católico, sin embargo, también hay una gran cantidad de programas no católicos que puedes elegir. Hoy en día hay un sinnúmero de información sobre todos estos programas en línea. Encuentra más información aquí: Lista bilingüe de programas católicos.
  3. Aprende sobre las diferentes filosofías y métodos de aprendizaje, así podrás saber cuál es el más adecuado para tus hijos: Lista (no exhaustiva) sobre los métodos de aprendizaje.
  4. Actualmente hay varios programas de matemáticas para la escuela en casa. Nosotros elegimos el programa Teaching Textbooks. Antes de decidirnos por este programa, utilizamos su versión gratis. Encuéntralo aquí: Clase de matemáticas.
  5. Lista de libros de la historia medieval y poesía, entre otros: Aquí puedes encontrar una lista de libros que puedes ordenar. Escoge las edades que les correspondan a tus hijos en la barra dorada Librería Madre de la Divina Gracia.
  6. En casa, también decidimos continuar con la formación en la fe utilizando un programa desarrollado por las Hermanas Dominicas de Santa Cecilia. El programa se enfoca en el aprendizaje de las virtudes para niños en los grados prekínder a secundaria (Middle School): Virtudes en práctica.

Tres estrategias prácticas para la escuela en casa

  1. Diseña un horario y establece una rutina escolar. Revisa este horario y rutina cada mes y haz las adaptaciones o cambios necesarios para tu familia.
  2. Otorga un espacio especial y determinado para la escuela en casa, organiza ahí todos los materiales escolares y asegúrate de que sea un lugar ameno para ti y tus hijos.
  3. Dos ventajas de la escuela en el hogar o la educación en casa son a) la flexibilidad y libertad que otorga, y b) el hecho de que tus hijos y tú, eligen el ritmo de trabajo con que llevan el plan de estudios (o syllabus en inglés). Por lo tanto, si vas a salir de viaje, tienes un cambio inesperado en tu día, o simplemente quieres cambiar de “aula de clases”, lleva contigo siempre el programa de estudios (de preferencia impreso) y cumple con el horario y la rutina diaria en la medida de lo posible.

 

Verónica López Salgado, M.A.
Feliz esposa y mamá/Teóloga, traductora, consultora e instructora independiente
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[1] 1 “La Iglesia Doméstica,” Catecismo de la Iglesia Católica, (consultado el 9 de mayo de 2021) §1657, en la Santa Sede. http://www.vatican.va/archive/catechism_sp/p2s2c3a7_sp.html

[2] Groome, Thomas H. Will There Be Faith? A New Vision for Educating and Growing Disciples. (New York: Harper One, 2011) 205, Kindle Edition.

[3] Karol Wojtyla, Love and Responsibility (San Francisco: Ignatius Press, 1993), 217.