Tag Archives: Matrimonio

OCTUBRE – Consejos Para la Vida en Pareja

POR TU MATRIMONIO

TIPS SOBRE EL MATRIMONIO – OCTUBRE 2023

1- Nunca estés resentido cuando encuentres dificultades en tu matrimonio. En lugar de eso, dile a Dios: “¡Gracias, Señor, por esta oportunidad de sacrificarnos y aprender a amar como Tú!”.

2- Cada vocación es una llamada de Dios, una llamada al amor. Lo que significa vaciarnos nosotros para vivir de cara a los demás. ¿Cómo te “vaciarás” hoy por tu cónyuge?

3- Aunque te hayas casado con el amor de tu vida, cuya presencia te trae alegría, esa persona nunca podrá hacerte completamente feliz. La tristeza aguarda a aquellos que esperan que su matrimonio les haga la vida plena; sólo una relación con Dios puede lograr eso.

4- “Mis discípulos son tu regalo para mí”, oró Jesús a su Padre la noche antes de morir (Jn 17,24). Tu cónyuge y la familia son regalos de Dios, ¡y vale la pena luchar por ellos!

5- Nos sorprendemos cuando encontramos la cruz en nuestra vocación; pero la cruz es parte necesaria del amor. Abrázala y verás crecer tu amor.

6- Asistan a Misa juntos como familia. Participen en el sacrificio de Cristo, porque ese es el combustible que fortalece a una familia para sacrificarse unos por otros.

7- Un niño que ve a su padre arrodillarse ante Dios queda impactado. ¡El hombre más poderoso que conoce dobla la rodilla ante alguien aún más poderoso! Y planta una semilla de fe… ¡Qué gran ejemplo!

8- La amistad es la base de un matrimonio saludable. El día que asistimos a una boda a menudo escuchamos: “Hoy me caso con mi mejor amigo/a”. Recordemos que esa amistad durará sólo si compartimos todo con nuestra pareja.

9- La infidelidad física comienza como una infidelidad emocional. Ten cuidado con la tentación de compartir lo más profundo de tu alma con alguien del sexo opuesto que no sea tu cónyuge. Comienza inocentemente; pero no terminará así.

10- ¿Crees que Dios está ausente durante tu lucha matrimonial? Él está al otro lado de la cruz, llevándola contigo e invitándote a amar como Él ama.

11- La próxima vez que te sientas abrumado por la sencilla belleza de tu vida familiar, cuando sientas que perteneces y eres amado, recuerda: ¡es sólo una pequeña muestra del amor y la pertenencia del cielo!

12- “Te amaré y te honraré todos los días de mi vida”. Esa fue la promesa que te hicieron y que hiciste en tu boda. Hoy puedes usarla como examen de conciencia: “¿Te amé hoy? ¿Te honré hoy?”. Es una buena práctica.

13- Nos enamoramos y esa sensación de sentir mariposas en el estómago se ha ido. Sí así es, con el tiempo la química baja su intensidad en el amor. Pero el amor no es un sentimiento, es una elección. ¡Elige amar y las encontrarás de nuevo!

14- ¿Estás peleando de nuevo y te estás desanimando? Piensa que cuando tu piel esté arrugada y tu cabello gris, recordarás esta pelea, te reirás y dirás: “¡Incluso los tiempos difíciles valieron la pena!”

15- San Pablo nos desafía. Dice que, en el matrimonio, los cónyuges están llamados a amarse unos a otros como Cristo amó a la Iglesia y se entregó por ella (Ef 5,25). Cuando miro el crucifijo, ¿mi amor conyugal se parece a Su amor?

16- “Estoy cansado”- piensas-. La vida familiar es exigente. Y parece que nunca tendré un descanso. ¿Cuánto tiempo podré seguir así?”; Siempre y cuando lo hagas por amor a Dios.

17- Mientras un padre sostiene a su bebé recién nacido por primera vez, tiene una idea aterradora: “Mi relación con este niño afectará para siempre mi comprensión de lo que significa llamar a Dios ‘Padre’”. Tienes razón: papá, tu responsabilidad es inmensa.

18- Cuando se sufre en el matrimonio, el divorcio puede parecer un escape feliz, una medicina mágica que quita el dolor. No creas en ese sueño. El sufrimiento al otro lado del divorcio es aún peor.

19- “Habéis guardado el buen vino hasta ahora”, dijo el mayordomo a los esposos después de que Jesús convirtió el agua en vino en su banquete de bodas (Jn 2,10). Tenemos miedo de permitir que Dios entre en nuestro matrimonio. Pero su presencia siempre trae algo aún mejor.

20- Cuando esperamos que nuestro matrimonio nos haga felices, tenemos una expectativa poco realista. ¡Solo Dios puede hacerte feliz! El resentimiento está al alcance de la mano cuando esperamos que un ser humano, como nuestro cónyuge, proporcione lo que sólo Dios puede darnos.

21- San Juan de la Cruz le dijo una vez a una monja que luchaba en su comunidad religiosa: “Donde no hay amor, pon amor, y allí encontrarás amor”. Esto funciona tanto para monjas como para parejas casadas.

22- Ha sido un largo día. Al entrar en casa, deja el estrés afuera, no lo traigas contigo. En lugar de esto, ingresa con una sola pregunta en mente: “¿Cómo puedo servir a mi familia hoy?”.

23- El Catecismo dice que a través del sacramento del matrimonio, “Cristo habita con los esposos cristianos” (párr. 1642). ¿Recuerdas esto en tus alegrías y tristezas de la vida cotidiana?

24- ¿Quién dijo que el matrimonio sería fácil? Pequeña es la puerta y angosto el camino que lleva a la vida (Mt 7,14). Es un camino difícil, pero Jesús lo está recorriendo contigo. Habla con él al respecto.

25- Reza con tu cónyuge todos los días. Reza en voz alta. Al principio será incómodo; pero, con el tiempo, descubrirás que conduce a una intimidad y una comunicación preciosa y mucho más profunda entre vosotros.

26- Haz hoy algo espontáneo por tu cónyuge: un acto de servicio, una llamada inesperada, un pequeño obsequio, una cena especial… El esfuerzo que supone romper la rutina diaria es una gran prueba de amor.

27- Ten cuidado con ese deseo de escapar de una conversación incómoda con tu cónyuge. No lo evites: sé el primero en sacar el tema. ¡Sé valiente, sé un héroe! Tu cónyuge también necesita tener esa conversación incómoda.

28- Aceptar a tu cónyuge no significa estar ciego ante sus defectos. Significa reconocer tanto lo bueno como lo malo, y luego demostrarle que de todos modos vale la pena amarlo.

29- No cedas a ese espíritu de desánimo cuando las cosas se pongan difíciles en el matrimonio. Dios siempre está con vosotros y nada es imposible para Él.

30- El desierto es el lugar donde crece el amor y el compromiso. Nunca cedas ante el miedo cuando sientas que tu amor se ha secado. El amor ahora debe ser una elección, pero esa elección ensanchará tu corazón.

31- Piensa en los grandes santos que estuvieron casados. ¿Qué los hizo santos? ¿Crees que nunca lucharon? Sí lo hicieron, pero eligieron seguir amándose todos los días. Éste es el verdadero camino de la santidad.

AGOSTO – Consejos Para la Vida en Pareja

TIPS SOBRE EL MATRIMONIO – Agosto

  • 1 de agosto  -“¿Qué nos separa del amor de Cristo? ¿La angustia, la persecución, el hambre, la desnudez, el peligro o la espada?” Rom 8:35 ¡La respuesta es que nada nos separa de Él! No olvides cuidar de Cristo cuando las cosas se pongan difíciles en tu matrimonio, porque Él siempre estará  ahí para ti.
  • 2 de agosto – Sal de tu camino hoy para animar a tu cónyuge. Las palabras de afirmación son un símbolo de esperanza y amor.
  • 3 de agosto – La etapa de “enamorarse”, aunque hermosa e insustituible, puede desvanecerse en los últimos años de un matrimonio. El verdadero amor duradero es producto de la intencionalidad, la elección y el sacrificio.
  • 4 de agosto – San Juan Vianney es el santo patrón de los párrocos. ¿Tiene su familia uno o dos amigos sacerdotes? Invítelos, celebre su sacerdocio y ore por ellos.
  • 5 de Agosto – Dios se nos revela de maneras misteriosas. ¿Cuáles son algunas de las formas en que Dios se ha revelado a usted y a los miembros de su familia en el último año?
  • 6 de agosto – “Necesitamos orar para que las parejas casadas amen su vocación, incluso cuando el camino se vuelve difícil”. (San Juan Pablo II) ¿Cómo puedes ser un apoyo espiritual y práctico para otras parejas y familias que están luchando?
  • 7 de agosto – “Bienaventurados aquellos siervos a quienes el amo encuentra vigilantes a su llegada” (Lc 12, 35-40). Recordemos hoy que en última instancia le pertenecemos a Dios, y oremos para que siempre busquemos Su voluntad antes que la nuestra.
  • 8 de agosto – Cuando te sientes frustrado, el silencio a veces puede ser la mejor alternativa. Piensa antes de hablar y tómate el tiempo para decidir cuál es la mejor manera de responder a tu cónyuge. La comunicación siempre tiene que darse con amor.
  • 9 de agosto – En medio de las discusiones, lucha contra el problema y no contra tu cónyuge. Recuerda que tu cónyuge y tú estáis en el mismo equipo.
  • 10 de agosto – Los niños aprenden lo que es el amor observando a sus padres. Demos un buen ejemplo a los niños para que aprendan a amar bien a los demás.
  • 11 de agosto – ¿Cuál es tu juego de mesa o de cartas favorito? ¡Habla con tu pareja para organizar una noche de juegos en casa!
  • 12 de agosto – ¿Buscas escaparte el fin de semana? Considera tomar unas vacaciones rápidas en pareja para “recargar energías”, antes de que acabe el verano. Busca en Google opciones para tener ideas.
  • 13 de agosto – Los atardeceres son una de las mejores cosas del verano. ¡Sal y mira la puesta de sol esta noche con familiares y amigos!
  • 14 de agosto – Puede ser desalentador para las familias mantener la esperanza en medio de los hechos violentos diarios. Sin embargo, el Evangelio de hoy nos trae esperanza. “ En el mundo tendréis  aflicción, pero confiad, pues yo he vencido al mundo”.(Juan 16:33)
  • 15 de agosto – En esta fiesta de la Asunción de María, ora sobre cómo tú y tu familia pueden crecer en santidad, con María como modelo.
  • 16 de agosto – Escuchar genuinamente no es tarea fácil. No obstante, escuchar es una parte esencial de la comunicación. ¿Necesita consejos para escuchar mejor? Encuéntralos en nuestra página web de Por tu Matrimonio.
  • 17 de agosto – Mientras los meses de verano todavía estén aquí, ¡aproveche el clima cálido! Conduzca hasta un parque local y haga una caminata con su cónyuge. Encuentre su lugar para recolectar como pareja.
  • 18 de agosto – El autocuidado es imprescindible para cuidar adecuadamente de los demás. No olvides cuidar de ti mismo primero, estar en paz y conciliado con tu espíritu.
  • 19 de agosto – ¡Los matrimonios y las familias glorifican a Dios! Todas las palabras y acciones entre los miembros de la familia deben reflejar el gozo y el amor incondicional del Señor.
  • 20 de Agosto – ¿Quieres pasar una noche divertida en casa? Propón hacer juegos de mesa o ver videos antiguos en familia, pasarás un rato muy divertido.
  • 21 de agosto – Jesús nos recuerda hoy que su camino no es el camino más  fácil, porque nos exige mejorar cada día. Oremos para confiar y seguir al Señor siempre.
  • 22 de agosto – Las vacaciones nos conceden más tiempo para disfrutar con los seres queridos, rezar más y pasar más tiempo ante el Santísimo. ¡No lo desaprovechen!
  • 23 de agosto – Si algo te pesa emocionalmente, no lo dudes y acude a tu cónyuge en busca de apoyo. ¡Recuerda que él/ella está ahí para ti y es tu mejor amigo/a!
  • 24 de agosto – Santo Tomás de Aquino nos enseñó que cuanto más sabes, más capaz eres de amar a los demás. Aprende a compartir todo de tu vida (trabajo, oración, reflexiones…)con aquellos que amas.
  • 25 de agosto – Dios es el autor del amor. Recen por fortalecer su amor hoy y todos los días.
  • 26 de agosto – ¿Recuerdan adónde fueron en su primera cita como novios? Vuelvan a visitar la ubicación y reaviven la emoción del primer encuentro. Recuerden la chispa que les unió.
  • 27 de agosto – Santa Mónica nunca dejó de orar por la conversión de su hijo, San Agustín. Que todas las madres se acojan a Santa Mónica y siempre recen por sus hijos.
  • 28 de agosto – “Pidan y se les dará ; busquen y encontrarán ; llamen y se les abrirá la puerta”; (Lc 11- 9). No tengas miedo de pedirle a Dios cualquier intención especial. ¡No hay nada imposible para Él!
  • 29 de agosto – Ser agradecido recompensa todo y es la clave para vivir con plenitud y en conexión con nuestro planeta Tierra.
  • 30 de agosto – Aunque la vida, a veces, puede ser estresante, no olvides sonreír al final de cada día y reconciliarte con tu pareja.
  • 31 de agosto – Decide tener razón o estar felizmente casado. El matrimonio a menudo implica aceptar cuando estás equivocado. La humildad es la virtud que te permite crecer en pareja.

SEPTIEMBRE – Consejos Para la Vida en Pareja

POR TU MATRIMONIO

TIPS SOBRE EL MATRIMONIO – SEPTIEMBRE 2023

 

  1. Cuidar de tus hijos a veces significa dejar de dedicarle tiempo a tu matrimonio. Cuidar la relación de pareja es beneficioso para los niños. Si quieres una familia feliz, que tu matrimonio sea también una prioridad.
  2. Sorpréndanse como marido y mujer de vez en cuando con café, dulces o flores. Por mencionar algunos ejemplos. Es una bonita forma de demostrar que piensan el uno en el otro.
  3. “Entonces Jesús dijo a los discípulos: El que quiera seguirme que se niegue a sí mismo, cargue con su cruz y me siga” (Mt 16, 24). Nunca tenemos que llevar solos nuestras cruces. Acude a Cristo y permite que tu esposo/a te ayude a cargar también tu cruz.
  4. Puedes tener razón o estar felizmente casado/a. El matrimonio a menudo implica aprender (o que te digan) cuando estás equivocado/a. Aceptar humildemente esto cuando es cierto refuerza el vínculo en pareja.
  5. La relación con otros miembros de la familia a menudo afecta a la vida matrimonial. ¿Cuáles son las bendiciones y los retos que han surgido en su matrimonio a causa de tu familia o la de tu esposo/a?
  6. “Porque donde hay dos o tres reunidos en mi nombre, yo estoy allí, en medio de ellos”(Mt 18,20). Jesús está contigo en cada momento de tu matrimonio. No olvides hacerlo el centro de tu relación.
  7. Dedica tiempo para cultivar el amor que sientes por tu esposo/a. Los pequeños gestos diarios de amor y aprecio darán grandes frutos en tu matrimonio.
  8. Hoy la Iglesia celebra, entre otras, la Natividad de la Santísima Virgen María. María siempre confió en el Señor y en sus planes. Quédate tranquilo sabiendo que Dios  tiene un plan de vida para tu matrimonio y tu familia, ¡incluso cuando es difícil de entender!
  9. “Tanto amó Dios al mundo, que entregó a su Hijo único, para que quien crea en él no muera, sino tenga vida eterna” (Jn 3,16). El amor de Dios es un amor sacrificado. ¿Estás dispuesto a sacrificarte por tu amado/a?
  10. En momentos de tensión, recuerden el día de su boda, la luna de miel o los momentos de alegría. Puede ayudarles a poner las cosas en perspectiva.
  11. ¿Cuál es la flor o el aperitivo favorito de tu esposa? Sorpréndela esta semana con ese detalle.  ¡Qué no se apague la chispa!
  12. “No hagan nada por ambición o vanagloria, antes con humildad estimen a los otros como superiores a ustedes mismos” (Flp 2,3). La humildad es una gran ganancia en el matrimonio, que busca servir en lugar de ser servido. Abre tu corazón a las necesidades de tu esposo/a.
  13. La familia es una escuela de amor; busca oportunidades cada día para aprender un poco más a amar a tus seres queridos.
  14. ¿Tienes un crucifijo en un lugar notorio de tu casa? Ver el sacrificio de Jesús es un gran recordatorio del amor al que los esposos están llamados cada día.
  15. Hoy es la fiesta de Nuestra Señora de los Dolores. María conoció la tristeza, la pérdida y las dificultades. Pídele hoy ayuda para soportar con valentía las pruebas difíciles en tu matrimonio.
  16. Si llevan tiempo casados, ¿hay alguna pareja joven en su parroquia a la que podrían servir de mentores? Las parejas jóvenes suelen buscar guías confiables; es una bendición mutua.
  17. El matrimonio es una vocación: un llamado de Dios y un camino de santidad.
  18. Cuando recen en familia, hagan partícipes cada uno de los sentidos: enciendan una vela, contemplen el arte sacro o escuchen música. Nuestra fe sacramental puede acercarnos a Dios de diversas maneras.
  19. Escuchar con atención, le hace saber a la otra persona: “Me importa lo que dices; me importas tú”. Ayuda a que crezca el amor en el matrimonio.
  20. Prioriza el tiempo con buenos amigos que puedan fortalecer tu vocación matrimonial. Son las personas a las que podrás recurrir cuando se atraviese una mala racha.
  21. San Mateo respondió con un “sí” al llamado de Dios. Cada día, en nuestras familias, tenemos también la oportunidad de decirle “sí” a Dios y así acrecentar nuestra fe, esperanza y amor.
  22. Tus hijos aprenderán a amar no por el amor que tú les muestres, sino por el amor que le demuestres a tu esposo/a.
  23. Hoy celebramos la Memoria de San Pío de Pietrelcina, presbítero. Pidamos su intercesión para vivir matrimonios santos.
  24. Si uno de los dos está triste, enfermo o deprimido, ¿Qué suelen hacer para consolarse y ayudarse mutuamente?
  25. Un malestar o un dolor, una angustia o una molestia. ¿Qué puedes hacer? Ofrecerlo. Esta práctica espiritual tradicional de ofrecer nuestros problemas como una oración puede redirigir nuestra energía de nuestra propia tristeza al bien de otro. ¿Por quién puedes ofrecer tus problemas de hoy?
  26. Tienes que saber ceder (en los desacuerdos) en tu matrimonio. Los dos tienen que ceder. Una vez que te toque a ti y la próxima vez que le toque al otro.
  27. San Vicente de Paúl es conocido por su amor a los pobres. ¿Quiénes son los pobres, los solitarios, los olvidados de tu vida? Tu familia puede ser un regalo de amor para ellos.
  28. Los conflictos son inevitables en toda relación, pero la forma en que los afrontes ayudará o perjudicará tu matrimonio. Busca puntos en común y haz todo lo posible por escuchar y comprender el punto de vista de tu esposo/a.
  29. Hoy, en la fiesta de los Arcángeles, pide su protección sobre tu matrimonio y tu familia. San Miguel Arcángel, ¡defiéndenos en la batalla!
  30. Cristo murió por nosotros. Los esposos dan su vida cada día el uno por el otro, y los padres por sus hijos. ¡Sus sacrificios merecen la pena!

JULIO – Consejos Para la Vida en Pareja

TIPS SOBRE EL MATRIMONIO – JULIO

  • 1. ¿Cuánta independencia es buena en un matrimonio? Ciertamente, el marido y la mujer no deberían depender del otro para su identidad o autoestima. La interdependencia es mejor. ¿Cómo dependes de tu esposo/a en el hogar?
  • 2. Tu familia es una comunidad. Esto significa que cuando una persona cambia su comportamiento -para bien o para mal- repercute en todos. Al sonreír, hacer un favor, o tener un detalle con uno de tus familiares, levantas el ánimo de todos en tu hogar.
  • 3. Reconoce las formas en las que tu esposo/a te acerca más a Dios.
  • 4. “Otras cayeron en tierra fértil y dieron fruto: unas cien, otras sesenta, otras treinta” (Mt 13,8). ¿Tu matrimonio es tierra fértil en la que puede florecer tu familia? Si quieres hacer algo por tus hijos, haz algo por tu matrimonio primero. Los hijos se benefician de un matrimonio fuerte y amoroso.
  • 5. El matrimonio es hasta que la muerte nos separe, no hasta que tengamos un desacuerdo. Ténganlo en cuenta cuando haya dificultades y trabajen juntos y en oración para resolverlo.
  • 6. Di “gracias”, especialmente por las cosas pequeñas. Así, tu esposo/a sabrá que te has dado cuenta y que aprecias lo que has hecho, por pequeña que sea la tarea.
  • 7. “De ese modo el Espíritu nos viene a socorrer en nuestra debilidad” (Rom 8,26). Cuando se avecina una decisión difícil, reflexiona cuál puede ser el plan de Dios para tu familia y pide al Espíritu Santo que te guíe. Tan sencillo como rezar: “¡Ven, Espíritu Santo!”.
  • 8. Como seres humanos, todos buscamos la felicidad, pero lo que el mundo sugiere que nos hará felices suele ser una felicidad temporal. Pide a Dios la gracia de buscar y dar felicidad verdadera a tu esposo/a cada día.
  • 9. ¿Cómo puede tu esposo/a sentirse más amado/a por ti? Pregúntale y actúa en consecuencia.
  • 10. El positivismo es la clave para una comunicación fructífera. Como esposos, anímense mutuamente y dejen que la amabilidad prevalezca sobre las críticas.
  • 11. San Benito enseñó a sus monjes a tener una “regla de vida” para ordenar sus días. ¿Cuál sería la “regla de vida” de tu familia?
  • 12. El clima de verano es ideal para pasar más tiempo al aire libre. En pareja y como familia, dediquen tiempo juntos a estar a fuera.
  • 13. Todas las relaciones son únicas; evita comparar tu matrimonio con otros y recuerda apreciar siempre a tu esposo/a por lo que es.
  • 14. En los momentos en que tu esposo/a se sienta desanimado/a, ofrece palabras de afirmación.
  • 15. Los meses de verano permiten tiempo extra para la oración. Programen tiempo adicional de oración al aire libre con los miembros de su familia.
  • 16. “Pidan y se les dará, busquen y encontrarán, llamen y se les abrirá” (Lc 11,9). No tengan miedo de pedir a Dios todo aquello que anhela su corazón para su matrimonio.
  • 17. El estado de tu alma y tu bienestar espiritual afectan tus relaciones con los demás. Acude a Cristo para que te guíe en tu matrimonio.
  • 18. Palabras mágicas en un matrimonio: “Mi amor, tenías razón” “Intentémoslo a tu manera” “¿Cuál es tu opinión?” “¿Me perdonas?”.
  • 19. “Recojan las sobras para que no se desaproveche nada” (Juan 6,12). A menudo, nuestra sociedad promueve hábitos de descarte. Por el contrario, en tu familia agradece todo lo que Dios te ha bendecido y comparte con los demás.
  • 20. La felicidad puede ser efímera. El amor desinteresado tiene el potencial de sostener a una pareja a largo plazo y proporcionarle una alegría duradera. Ama sin medida a tu esposo/a, da todo de ti por hacerlo/a feliz día a día.
  • 21. Vivir una vida de servicio puede ser muy satisfactorio en el matrimonio, sobre todo cuando una pareja tiene en sus objetivos hacer servicio juntos. Vivir la vida sirviendo al otro, y a los demás, fortalece su amor.
  • 22. “El reino de los cielos se parece a un comerciante de perlas finas: al descubrir una de gran valor, vende todas sus posesiones y la compra”. (Mt 13, 45-46). En tu vocación matrimonial, tu esposo/a es como esa perla. Dios les ha llamado a estar juntos. No dejen que el trabajo, ni los proyectos, ni las aficiones, ni siquiera sus hijos, desplacen a su esposo/a del primer lugar. Él o ella son su prioridad.
  • 23. Es fácil quedar atrapados en las posesiones materiales y deseos mundanos. No permitan que su matrimonio se vea consumido por ellos. No hay nada que podamos comprar que se compare con las bendiciones de la vida eterna.
  • 24. Si no lo has hecho aún, haz que tu estado en Facebook diga “casado/a” y refiérete siempre a tu esposo/a de forma respetuosa y cariñosa en Internet. Comparte con tu esposo/a la contraseña de tus redes sociales. No hay nada que ocultar entre marido y mujer.
  • 25. El verano es el tiempo ideal para viajar. Planeen una peregrinación a alguna Basílica o lugar religioso cercano. Vayan en familia y den gracias por la bendición de estar juntos.

    26. La tecnología es maravillosa cuando funciona bien, pero a veces priva a las parejas de pasar tiempo de calidad juntos. Utilicen herramientas como el correo electrónico, Facebook y los mensajes de texto para conectar como pareja, no para desconectarse.

  • 27. Muchas parejas no están seguras de cómo rezar juntos. Chequen la página web de portumatrimonio.org en donde encontrarán recursos para rezar juntos, y mucho más.
  • 28. ¿Qué significa ser “libre” en un matrimonio? San Juan Pablo II explicó que ser libre significa que Jesús nos libera de nuestra dureza de corazón para vivir plenamente el plan de Dios para nuestros matrimonios y familias. ¡Qué maravilloso!
  • 29. Hacer cosas juntos es bueno, pero dependiendo de su personalidad algunas parejas pueden sentirse asfixiadas de hacer todo juntos todo el tiempo. Es bueno darse espacio de vez en cuando y encontrar oportunidades para pasar tiempo a solas (individualmente) y refrescar tu espíritu, aportando un “yo” renovado y nuevas ideas a tu matrimonio.
  • 30. San Ignacio de Loyola, fundador de los Jesuitas, animaba la meditación de las Escrituras situándose en medio de un texto bíblico e imaginando la escena con gran detalle. Prueba a hacer este tipo de meditación esta noche con tu esposo/a.
  • 31.¿ A ti o a tu esposo/a les gusta cocinar ? Preparen juntos un platillo en la cocina y disfrutenlo como si de una cita amorosa se tratara.

UNIENDO NUESTRAS VIDAS POR LA IGLESIA CATÓLICA

¿Por qué casarnos por la Iglesia?

Los beneficios del Matrimonio Católico

“La Iglesia es un bien para la familia, la familia es un bien para la Iglesia. Custodiar este don sacramental del Señor corresponde no sólo a la familia individualmente sino a toda la comunidad cristiana”. (Papa Francisco, Amoris Laetitia 87)

En general, las parejas que eligen llevar su matrimonio a la Iglesia reciben muchos dones: paz de corazón, unidad y acompañamiento con la Iglesia, y plenitud de los sacramentos, especialmente el don de recibir la Sagrada Comunión y la Reconciliación.

Los científicos sociales han descubierto que las parejas que reconocen la presencia de Dios en su relación, experimentan más satisfacción y tienen más probabilidades de lograr un matrimonio para toda la vida. Uno de los muchos beneficios de un matrimonio sacramental es el del poder de la gracia de Dios, que ayuda a las parejas a mantener viva la alianza de amor y encontrar la felicidad juntos.

¿Por qué obtener el Sacramento del Matrimonio?

“Cristo Señor ‘sale al encuentro de los esposos cristianos en el sacramento del matrimonio’, y permanece con ellos… los esposos son consagrados y, mediante una gracia propia, edifican el Cuerpo de Cristo y constituyen una iglesia doméstica”. (Papa Francisco, Amoris Laetitia 67)

Los votos intercambiados por la pareja son una alianza sagrada a través del cual los esposos se abrazan y, juntos, abrazan a Jesús como su compañero. A través de su unión con Cristo, participan en la alianza inquebrantable entre Dios y la humanidad: la alianza que selló Jesucristo con su muerte y resurrección.

El matrimonio católico es único entre otras relaciones matrimoniales porque es un Sacramento que hace que Cristo esté presente en nuestras vidas y especialmente en las familias. La relación entre marido y mujer refleja la relación de Jesucristo con su pueblo. En la tradición católica, el esposo y la esposa aceptan una misión en el plan salvífico de Dios para la humanidad. La esposa y el esposo son embajadores del amor de Dios y colaboran con Dios para seguir construyendo su Reino aquí en la tierra.

https://patriciaj8.sg-host.com/noviazgo-y-compromiso/planeando-una-boda-catolica/

Nota: Este es una descripción básica del Matrimonio Católico. Debido a que la situación de cada pareja es única y el proceso puede variar de una parroquia a otra, de una diócesis a otra y de un país a otro, las personas interesadas en casarse  la Iglesia Católica, para obtener una convalidación matrimonial y/o una declaración de nulidad deben hablar primero con su párroco para obtener orientación personal y específica.

La belleza del Matrimonio

La belleza del Matrimonio

Por: Ana C. De la Garza

Hay una frase que dice “El Matrimonio es como un jardín: requiere de mucho amor y un poco de trabajo cada día”.

Y es que el amor en el Matrimonio no hay que darlo por sentado, siempre hay que cuidarlo, alimentarlo y trabajarlo. Recuerdo una vez un consejo que nos dio un Sacerdote en una homilía y me parece muy importante compartirlo; nos dijo que todos los días nos dedicáramos 15 minutos en pareja, sin ninguna distracción de celulares, televisión, hijos, etc. 15 minutos para conversar, mirarnos cara a cara, estar juntos y cultivar nuestra relación.

Yo también les recomiendo ponerse una cita al mes, como un “date”, donde puedan hacer algo juntos que disfruten como pareja. Desde preparar una cena romántica o ir a algún lado a cenar, ir a andar en bicicleta o al cine, o incluso ver una película juntos en casa, pero sólo ustedes dos.

Dios diseñó el amor de esposos para que fuera una ayuda mutua, una compañía. Para no estar solos en este camino de la vida, para ser un reflejo del amor de Dios, para ser fecundos y educar y formar a nuestros hijos. Recordemos el pasaje del Génesis que habla de esto:

Dijo luego Yahvé Dios: No es bueno que el hombre esté solo. Voy a hacerle una ayuda adecuada”. ( Gn 2, 18 )

“De la costilla de Adán, Dios formó a la mujer, para ser su compañera, para acompañarse el hombre y la mujer en esta vida, para ser mejores amigos en el matrimonio y hacernos la vida mejor y más llevadera”.

Después dice: “Por eso deja el hombre a su padre y a su madre y se une a su mujer, y se hacen una sola carne” ( Gn. 2, 24 ) . El designio de Dios en esta unión es perfecta, hacerse una sola carne, una unión perfecta, que da el fruto de los hijos”.

Yo sé que existen dificultades en la vida cotidiana, en la relación de los esposos, y hay dos consejos que me gustaría compartir con ustedes para saber llevar la vida juntos:

  1. Perdonar. Perdonar las fallas del cónyuge. Y no recordarle en una discusión todas las cosas del pasado que nos molestan. Ya que esto sólo genera más conflicto.
  2. Ceder. No tratar siempre de tener la razón, habrá momentos en que será mejor ceder. Yo sé que hay cosas que son muy importantes para llegar a un acuerdo, como educar en la fe a los hijos, o los valores que queremos vivir en nuestra familia. Pero hay cosas triviales de la vida en las que no tenemos que llevar todo al campo de batalla.

El amor de pareja tiene sus etapas en la vida, vamos de la etapa del enamoramiento en la que todo es perfecto y sentimos mariposas en el estómago, a la etapa del amor y mayor intimidad, hasta llegar al verdadero amor de compromiso. Y al ir madurando el amor es posible que se atraviese por algunas crisis. Por eso es importante, en primer lugar, agarrarse de la mano de Dios, como dice la palabra Ma-tri-monio somos tres y en medio de esta relación debe estar Dios para que nos sostenga y nos lleve de su mano en este camino de la vida. Encomendar nuestro Matrimonio a Dios a través de los Sacramentos y de la oración,  también es importante. Si en algún momento sienten que no pueden, no duden en pedir ayuda; a un Sacerdote o a algún consultor especialista en Matrimonio. Yo recomendaría un especialista que fuera Católico y que conociese el Método de Jhon Gottman para terapia de pareja.

https://www.gottman.com/about/the-gottman-method/

Para terminar, les recomiendo encomendar siempre su Matrimonio a la Sagrada Familia. ¡Quiénes mejor que Nuestro Señor Jesucristo, su madre la Santísima Virgen María y San José para acompañarnos y guiarnos en nuestro Matrimonio y Familia!

Celebrando Matrimonios Mixtos

Celebrando Matrimonios Mixtos

Por Cynthia Psencik

Cuando hablamos de matrimonios mixtos, nos referimos a parejas que nacieron en diferentes países como también parejas de razas, etnicidades y culturas distintas. Se reporta que los matrimonios mixtos han aumentado continuamente desde el 1967 cuando fueron legalizados en los Estados Unidos. Para el 2015, una de cada seis parejas recién casadas están casadas con una persona de una raza o etnicidad diferente. La pareja mixta más común incluye hispanos y blancos (Pew Research Center). Es asombroso pensar que antes de los años 1967, los matrimonios mixtos eran prohibidos en ciertas partes de los Estados Unidos, y que hubiera alguna ley impidiendo que yo me casara con mi esposo.

​Mi esposo no solo es de una etnicidad diferente a la mía, sino también nació y creció en un estado diferente que yo – él es de Texas y yo de Nueva York. Llevamos casados siete años, y cada día aprendemos algo nuevo, ya sea de nuestras culturas, o de donde crecimos. Al principio de nuestro noviazgo dialogamos bastante acerca de lo diferente que fue nuestra crianza, yo como mujer hispana de padres dominicanos, y él como hombre blanco. Le asombraba la manera en que me comportaba con mi mamá, con la cual hablaba todos los días por casi una hora. O la manera en que mi mamá se comportaba conmigo, todavía queriendo cuidarme hasta después de estar casada. Mi esposo, sin embargo, creció bien independiente. Poco a poco se fue acostumbrando y aprendiendo que estas cosas eran importante para mi, como yo también fui aprendiendo de las cosas que eran importante para él, por ejemplo, el amor a los deportes profesionales.

Durante nuestro retiro de preparación para el matrimonio tuvimos la oportunidad de dialogar y describir costumbres de cada una de nuestras culturas que podrían impactar más adelante nuestro matrimonio. Las diferencias en culturas a veces aparecen de maneras sutiles en el matrimonio, y pueden crear dificultades si no existe comunicación entre la pareja. Es importante tener una disposición abierta para abrazar las costumbres y las expectativas que son importantes para cada pareja.

Reconocer y hablar de las diferencias

Durante su noviazgo, tomen tiempo para hablar acerca de su niñez y no dejar por desapercibido la importancia de ciertas costumbres y experiencias que pueden influenciar sus comportamientos. En una conversación con mi amiga, ella me comentó que durante su noviazgo, ella y su esposo que es de una etnicidad diferente, hablaron mucho acerca de su experiencia con el racismo, una experiencia muy lejana para su esposo. Fue importante para ella poder ser vulnerable y que existiera una apertura de parte de él para recibir lo que ella le presentaba, y de no minimizar sus experiencias. Esta conversación ayudó mucho a su esposo a comprenderla y ayudarla a navegar sus emociones, y responder adecuadamente.

Ser pacientes y seguir aprendiendo

Darse oportunidad para conocerse y crecer juntos es importante durante el noviazgo y su vida de casados. Ser paciente con uno mismo y con su pareja cuando resaltan cosas únicas a su cultura, ayuda a crear una atmósfera abierta para usted y su pareja. Yo vengo de una familia vibrante y animada, especialmente cuando se reúnen todos los familiares a la misma vez. Mi esposo no vino de una familia grande, y a veces pensaba que estábamos peleando cuando nos escuchaba hablar.

No todo va a tener sentido al principio, y hasta podemos criticar ciertas cosas de nuestra pareja y de su familia. Por eso es importante observar y hacer preguntas cuando no comprendes algo, aunque sea incómodo. Esto demuestra un sentido de curiosidad como también interés en aprender más acerca de los antecedentes familiares y las costumbres que nos influyen.

 

No hagan suposiciones

En la celebración del Día de Acción de Gracias durante nuestro primer año de casados, invitamos a mi familia a celebrar con nosotros. Teníamos música alta tocando de fondo, como era de costumbre en mi familia, mientras preparamos el pavo y la cena. De vez en cuando mi esposo entraba a la cocina, pero luego se iba un poco molesto. Mientras, yo seguía cantando y bailando con mi prima, mi hermana y mi mamá. Después de la celebración le pregunté a mi esposo qué le pasaba, y él me respondió que usualmente en su hogar, él era quien preparaba la cena para su familia, y se sintió molesto de que no le dimos esa oportunidad. Obviamente, no sabía lo importante que era para él tomar parte de las preparaciones, pues crecí entre las normas culturales donde las mujeres eran las que preparaban la comida, y yo asumí que no le interesaba.

Instruir a sus familiares cuando sea necesario

El Papa Francisco en Amoris Laetitia nos comenta: “Los esposos que se aman y se pertenecen, hablan bien el uno del otro, intentan mostrar el lado bueno del cónyuge más allá de sus debilidades y errores (113). Yo crecí en un ambiente donde no faltaba el gentío que venía a nuestro hogar a celebrar algún acontecimiento. De esta forma me acostumbré a siempre estar rodeada de personas, algo que es común en las personas extrovertidas. Mi esposo es introvertido. Me costó tiempo realizar que a veces cuando estamos en reuniones familiares él necesita receso para poder recargarse. Mi familia notaba esto, y pensaba que no les caía bien, y a veces hacían comentarios acerca de su comportamiento. Tuve que explicarles que no era algo en contra de ellos, y fue un momento de aprendizaje para ellos también. Para ayudarnos, mi esposo y yo creamos un plan donde nos señalamos cuando el necesitaba un tiempo de receso durante una visita familiar.

Ser razonables con sus expectativas

Lo más seguro es que su pareja no hable español, o no tiene ritmo para bailar su música. Podemos entrar en el error de que “si me ama, hará el esfuerzo”. Pero la realidad es que aprender un lenguaje nuevo como adulto es un don, y no es tan fácil poder pensar y hablar en un lenguaje diferente al lenguaje nativo. Me enojaba bastante al principio porque estaba centrada en que mi esposo aprendiera español para que se comunicase mejor con mi familia, pero no era por falta de esfuerzo. Me dediqué entonces a darme cuenta de las diferentes maneras que él intentaba comunicarse y relacionarse con mi familia. De esta manera, aprendí a valorar la manera en que él y su familia pasan tiempo juntos viendo deportes profesionales.

Compartir y celebrar los dones que trae cada cultura

Una de las cosas más bellas de una pareja mixta es poder compartir sus tradiciones. Durante la planificación de nuestra boda, incluimos elementos de cada una de nuestras culturas. La ceremonia fue bilingüe, y durante la recepción, incluimos comidas, música y bailes de cada una de nuestras culturas. Esto brindó la oportunidad de que ambas familias aprendieran y celebraran elementos de cada una de nuestras culturas. Fue super divertido ver como su familia y amistades disfrutaron aprendiendo a bailar merengue y mi familia la música country.

 

Crear nuevas tradiciones

Es bello poder unir elementos de cada cultura en la relación. En vez de solamente enfocarse en uno u otro elemento de cada cultura, intenten crear una unión de ambas culturas, y formar sus propias tradiciones. Ya sea comida, música, tradiciones…, es importante que existan elementos de las dos tradiciones que acomoden ambas culturas adecuadamente. Al final del día, las diferencias que pueden existir crean momentos para seguir aprendiendo y creciendo juntos. Durante nuestro noviazgo, Evan y yo creamos una lista de canciones en Spotify con música romántica de cada género, y así él aprendió a disfrutar de la música en español, y yo de la música country.

Ante todo, ser amigos y construir una vida en conjunto. El Papa Francisco nos recuerda en Amoris Laetitia lo importante que es la amistad en el amor conyugal. El nos dice: “Después del amor que nos une a Dios, el amor conyugal es la máxima amistad. Es una unión que tiene todas las características de una buena amistad: búsqueda del bien del otro, reciprocidad, intimidad, ternura, estabilidad, y una semejanza entre los amigos que se va construyendo con la vida compartida” (Amoris Laetitia, 123). Por último, no dejen a un lado el divertirse mientras se acomodan y continúan aprendiendo el uno al otro.

¿Quién administra mejor las finanzas en el hogar, el hombre o la mujer? Por Verónica López Salgado

En un matrimonio, las finanzas suelen ser un tema de conversación complicado. Sin embargo, la estabilidad económica es de suma importancia y el hablarlo es vital para que no surjan problemas innecesarios en el hogar.

Varios estudios de investigación muestran que tener estabilidad económica en un matrimonio o ser un buen proveedor financiero es muy valioso para las parejas. Por mencionar uno, en el año 2017 un estudio en los Estados Unidos realizado por el Centro de Investigación PEW resaltó que “alrededor de siete de cada diez adultos (71%) dijeron que era muy importante que un hombre fuera capaz de mantener a su familia económicamente para ser un buen marido o compañero, mientras que sólo el 32% dijo lo mismo para que una mujer fuera una buena esposa o compañera”.[1]

Saber manejar adecuadamente las finanzas es imprescindible para desarrollar una sana administración financiera. El objetivo es que al terminar de leer este artículo las parejas puedan tener una mejor idea de cómo hablar sobre finanzas antes de que los problemas afecten su relación, cómo gestionar el dinero de forma inteligente, cuando es necesario buscar ayuda y qué muestran algunas estadísticas sobre los matrimonios que terminan por problemas relacionados con el dinero.

De acuerdo con un artículo publicado por Business Insider, el dinero es una de las razones por las cuales las parejas discuten más y no es de extrañar que los conflictos relacionados con el dinero se citen con frecuencia como motivo de divorcio.[2] Este mismo artículo señala 12 problemas financieros que tristemente separan a las parejas. Los mencionaré brevemente:

  1. Actitudes opuestas hacia el dinero
  2. Prioridades financieras divididas
  3. Deuda de tarjetas de crédito
  4. Infidelidad financiera
  5. Exceder sus presupuestos
  6. Incapacidad para comprometerse con el gasto
  7. Grandes compras impulsivas
  8. Estrés por combinar cuentas bancarias
  9. Gastos mayores inesperados
  10. Gastar demasiado en la boda
  11. No tener asesoramiento financiero previo al matrimonio
  12. Pérdida del control financiero

Por imposible que parezca, cada uno de estos problemas tiene solución y su matrimonio no tiene por qué terminar, mucho menos por problemas financieros. No obstante, hacer un plan financiero estratégico que funcione para su matrimonio y familia conlleva amor, conciencia, disciplina, asesoramiento y mucha oración pidiendo al Espíritu Santo sus dones y frutos, particularmente el don de la sabiduría y el fruto de la templanza.

Entablar el tema de las finanzas en el matrimonio debería ser parte de la preparación prematrimonial. Sin embargo, no siempre sucede así. Aquí enumero 5 estrategias – han sido útiles en mi propio matrimonio – que les ayudarán a platicar sobre cómo omo manejar mejor el dinero en su hogar, sin importar en qué etapa de su matrimonio se encuentren (recién casados, algunos años de matrimonio, etc.).

  1. Siempre comiencen cada plática con oración. Pueden pedir la intercesión de los santos a los que pueden rezarles en cuestiones económicas.
  2. Busquen un momento propicio para hablar específicamente sobre sus sueños, metas y objetivos económicos. ¿Cuáles son sus prioridades? Actualmente estamos viviendo una preocupante inflación económica en el país. Es indispensable tener un plan financiero.
  3. Cuando se casaron prometieron estar juntos “en la riqueza o en la pobreza”. Aunque llegue el estrés relacionado con el dinero, asegúrense de recordarse mutuamente que son un mismo equipo y, por lo tanto, todo lo pueden resolver juntos.
  4. Comuníquense con honestidad y claridad. Hablar sobre dinero suele causar tensión. No permitan que este tema ocasione problemas. Al contrario, si platican abiertamente podrán atacar las dificultades antes de que se aproximen.
  5. Como hombres y mujeres, Dios nos creó con dones y talentos únicos. Psicológica e intelectualmente, los hombres y las mujeres percibimos, actuamos y pensamos distinto. ¿En su matrimonio, quien de los dos puede administrar más acertadamente las finanzas? ¿Cómo se complementan?

Aunque puede sonar más fácil de lo que realmente es, existen formas para gestionar el dinero sabiamente, con prudencia y control propio. Hoy en día hay recursos que pueden asesorarlos y guiarlos. Por ejemplo, walletwin.com es una compañía formada por un matrimonio católico que cuenta con asesoramiento financiero personalizado. Tiene un podcast, una academia, un programa de coaching, un programa para parroquias, un libro y varios recursos gratuitos, como una guía con estrategias inteligentes para pagar las deudas rápidamente. Pedir consejos no es pecado.

Ahora bien, si actualmente están atravesando una grave situación económica/financiera en su matrimonio, no duden en buscar ayuda de inmediato y en donde sea posible. Como dice un dicho muy conocido, más vale tarde que nunca. Eso aplica para las finanzas también. Lo más probable es que en la comunidad en donde viven, haya programas de apoyo financiero. Su comunidad parroquial debe ser un lugar de acogida y caridad; pueden guiarlos para saber con quién acudir para que los problemas que están experimentando sean más livianos y llevaderos. ¡Ánimo!

[1] Ver https://www.pewresearch.org/fact-tank/2019/02/13/8-facts-about-love-and-marriage/ (en inglés)

 

[2] Ver https://www.businessinsider.com/divorce-money-issues-financial-relationship-couple-2019-7 (en inglés)

Crianza por la paz y la justicia por Verónica López Salgado

Lo que somos y hacemos como padres de familia se ve reflejado en nuestros hijos, de alguna u otra manera. Desde su comportamiento, su interacción con todos los seres vivos, su manejo de emociones y habilidad para socializar, hasta su manera de amar y respetar la vida – entre otros componentes fundamentales de su desarrollo físico, mental y espiritual.

San Antonio de Padua, Doctor de la Iglesia y patrono de los pobres, escribió: “las acciones hablan más que las palabras; deja que tus palabras enseñen y tus acciones hablen”. Nuestros hijos aprenden de lo que ven en nosotros como padres de familia. ¡Vaya que tenemos en nuestras manos una tarea irremplazable como iglesia doméstica! Nuestra obligación y responsabilidad como católicos cristianos es criar y educar seres humanos con una perspectiva sacramental de la vida. Las familias son los primeros educadores en el camino de la fe. Sin embargo, si deseamos recuperar la riqueza de las familias cristianas en el contexto de nuestro tiempo y cultura teniendo en cuenta el actual clima político y social en el que vivimos, primero debe realizarse urgentemente una educación en la fe que sea intencional e integral.

Es por eso que hablar de paz y justicia en el hogar es de suma importancia, ya que enseñar con el ejemplo de nuestras acciones es comenzar a vivir los principios de la Enseñanza Social Católica en casa. ¿Pero, cómo hacerlo?

Ciertamente, no existe un manual para seguir paso a paso, pero sí podemos aplicar algunos cambios a nuestra vida familiar para ayudar a guiar nuestra crianza por la paz y la justicia.

A continuación, te presento algunos ejemplos basados en el libro (en inglés) de los autores Kathleen y James McGinnis: Parenting for Peace and Justice.

 

  • Vivir una vida más simple, de generosidad

Todo lo que comemos, lo que vestimos y en lo que gastamos nuestro tiempo tiene un impacto positivo o negativo en la vida de nuestros hijos. Y, por ende, en las decisiones que tomarán ahora y en el futuro. Si queremos que nuestros hijos se preocupen por los necesitados, cuiden del medio ambiente y vivan una vida justa y con caridad, empecemos en casa con ellos desde pequeños.

  • Jamás expresar violencia en la familia

Practicar la paz comienza en casa. Que nuestras familias sean hogares que transmitan amor, armonía y alegría. Que no se conviertan en núcleos destructivos donde la violencia intrafamiliar (física, mental, emocional) sea el pan de cada día para nuestros hijos.

  • Ayudar a los niños a hacer frente a la violencia en nuestro mundo

Cuando nuestros hijos experimentan la violencia en su comunidad, ya sea en persona (en la escuela) o a través de la televisión (programas violentos o noticias nacionales), nosotros como padres estamos llamados a ayudarles a razonar lo que significa la violencia y cómo nos afecta. Hagámoslo siempre desde una perspectiva de fe católica, guiándonos de los principios de la Enseñanza Social Católica.

  • Examinar nuestra vida familiar

¿Tenemos prejuicios? ¿Quiénes son los amigos con los que compartimos? ¿Con que tipo de juguetes juegan nuestros hijos? ¿Cómo es la vida familiar de nuestros miembros de la familia extendida? ¿Cómo es la escuela a la que asisten nuestros hijos? ¿Hablamos lo suficiente con nuestros hijos sobre el racismo, la guerra, el cuidado del planeta, etc.?

  • Evitar los estereotipos de los roles sexuales

Si ambos, papá y mamá, se encargan juntos de las labores de la casa, nuestros hijos crecerán sabiendo que una familia hace equipo para cuidar del hogar. No es papel exclusivamente de la mamá lavar los trastes o del papá salir a trabajar. Quitemos esos estereotipos que afectan negativamente las relaciones interpersonales de nuestros hijos. También, es fundamental en la crianza involucrar a los niños en las labores de la casa, de acuerdo a su edad.

  • Involucrar a la familia en la acción social

Siempre que sea posible y de acuerdo con la edad de nuestros hijos, tratemos de involucrarlos y exponerles a la acción social dentro y fuera de la comunidad parroquial. Hagámoslo divertido para ellos y hablemos a menudo sobre las obras de misericordia y justicia, espirituales y corporales.

  • Orar en familia

Nuestros hijos deben saber que Jesús es el mejor ejemplo de como vivir una vida por la paz y la justicia. Ayudémoslos a desarrollar una relación personal con Jesús, haciendo la oración familiar parte de nuestra rutina diaria.

Mayo – Consejos Para la Vida en Pareja

TIPS SOBRE EL MATRIMONIO – MAYO

  • 1 de mayo: Hoy celebramos a San José Obrero. Jesús trabajó junto a su padre adoptivo durante muchos años. Trabajar junto a tus hijos puede enseñarles diligencia y perseverancia, además de una habilidad. También es un gran momento de unión. Pruébalo.
  • 2 de mayo: Mayo es un mes tradicionalmente dedicado a la Virgen. Considera la posibilidad de rezar un rosario al menos una vez a la semana, o incluso sólo una decena, y confiar a tu esposo/a y familia al cuidado maternal de María.
  • 3 de mayo: “No amemos solamente con la lengua y de palabra, sino con obras y de verdad” (1 Juan 3,18) Decir “te quiero” es bueno. Ser fiel a tus palabras es mejor. Demostrar tu amor haciendo algo bueno o sacrificándote por tu amado/a es verdadero amor. ¿Qué acto de amor puedes hacer hoy?
  • 4 de mayo: ¿Estás tú y tu esposo en forma y sanos; se esfuerzan por hacer ejercicio y comer bien? Hagan ejercicio juntos o denle tiempo al otro para que lo haga a su manera. Cuidar su cuerpo es importante, así que anímense mutuamente. Hazle saber a tu esposo/a que eres su mayor fan.
  • 5 de mayo: La vida es muy ajetreada y la oración rara vez “encaja” durante el día sin hacer un esfuerzo. Se intencional y reserva un tiempo para orar con tu esposo/a.
  • 6 de mayo: “Ustedes, en cambio, son una raza elegida, un sacerdocio real, una nación santa, un pueblo adquirido para anunciar las maravillas de aquel que los llamó de las tinieblas a su admirable luz” (1 Pedro 2,9). Dios nos ha llamado a todos a ser santos. ¿Cómo vives esta santidad en tu familia?
  • 7 de mayo: ¿De quién fue la culpa de su última pelea? Lo más probable es que se trate de una combinación de malentendidos, olvidos y expectativas diferentes de ambos esposos. Para resolver una discusión, fíjate más en lo que has aportado tú que en lo que ha hecho mal tu esposo/a.
  • 8 de mayo: Mayo es el mes de la Virgen. Haz de este mes una oportunidad para aumentar la devoción de tu familia hacia ella: recen juntos un Ave María o una decena del Rosario esta noche antes de irse a dormir.
  • 9 de mayo: “Conságralos en la verdad: tu palabra es verdad” (Juan 17,17) ¿Eres siempre sincero con tu esposo/a? No le mientas, aunque sea una mentira “inofensiva”. Estamos llamados a proclamar la verdad.
  • 10 de mayo: A veces nos estresamos a nosotros mismos (y, por lo tanto, a nuestro esposo/a e hijos) preocupándonos por cosas que realmente no afectan a largo plazo. ¿Eres culpable de prestar excesiva atención a cosas que no tiene importancia?
  • 11 de mayo: Jesús nos dio a su Madre María para que fuera también nuestra madre. Ella ha experimentado la alegría del nacimiento de su Hijo, la separación de él durante su ministerio, el dolor por su muerte y el glorioso triunfo de su resurrección. Pide su intercesión -y consuelo- en todos los aspectos de tu vida.
  • 12 de mayo: Seguro has oído el consejo: “Nunca te vayas a la cama enfadado con tu esposo/a”. Aunque, por lo general, esta es una buena regla, a veces una buena noche de sueño puede proporcionar un período de enfriamiento y ayudarlos a obtener una nueva perspectiva.
  • 13 de mayo: El uso de la Planificación Familiar Natural (PFN) ayuda a las parejas a desarrollar una actitud de bienvenida a los hijos. La PFN también puede utilizarse para espaciar o limitar el tamaño de la familia; tener un corazón abierto es importante.
  • 14 de mayo: Recuerda dar un beso de buenas noches a tu esposo/a, independientemente de los acontecimientos del día.
  • 15 de mayo: Esposos, hagan un esfuerzo extra por su esposa el día de hoy. Abrirle la puerta, sacarle la silla y caminar por el lado de la banqueta puede parecer anticuado, pero es una forma sencilla de tratar a tu mujer como una reina.
  • 16 de mayo: María se alegró con Isabel por la nueva vida que había dentro de ellas. Habla con tu esposo sobre la posibilidad de dar la bienvenida a un hijo en su familia.
  • 17 de mayo: Sigue honrando a María este mes: reúne a tu familia para rezar un rosario juntos.
  • 18 de mayo: En medio de una discusión, acércate a tu esposo/a. El contacto físico no puede arreglar todo, pero puede aliviar la tensión.
  • 19 de mayo: “Jesús dijo a sus discípulos: Les dejo la paz, les doy mi paz” (Juan 14,27) ¿Hay paz en tu hogar? Reflexiona sobre la promesa de paz que hace Jesús y hazte el propósito de hacer de tu casa un lugar de paz.
  • 20 de mayo: La intencionalidad se aplica también a la elección de palabras. Cuando hables con tu esposa/o, asegúrate de que tu tono y tu lenguaje reflejan amor. Evita el lenguaje acusador o defensivo y utiliza un lenguaje único que haga saber a tu esposa/a que es especial.
  • 21 de mayo: Piensa en tu esposo/a cuando tomes decisiones, aunque sean pequeñas, como cuándo llenar el tanque de gasolina o qué canal de televisión ver, o decisiones grandes, como hacer planes con amigos o escoger lugares para ir de vacaciones.
  • 22 de mayo: “No hay amor más grande que dar la vida por los amigos” (Juan 15,13). Amar a tu esposo/a significa hacer sacrificios por él/ella cada día.
  • 23 de mayo: Hoy, después del trabajo, haz una de las tareas o quehaceres de tu esposa sin que ella te lo pida.
  • 24 de mayo: Los pensamientos y comentarios negativos se alimentan a sí mismos. Rompan el ciclo centrándose en las cosas que aprecian de su amado.
  • 25 de mayo: A menudo, el simple hecho de reiniciar puede remediar un problema informático en una computadora. A veces los matrimonios necesitan un reinicio también. Si un problema no se resuelve fácilmente, prueben esto: Deténganse. Dejen que ambos se calmen. Perdonen. Pidan una “segunda oportunidad”.
  • 26 de mayo: Explora lo que hizo a tu amado/a la persona que es. ¿Qué rasgos heredó de sus padres? ¿Qué ha estado en su lista de deseos desde la adolescencia y puede lograr hacer contigo? ¿Quién fue la persona más influyente en la vida de tu esposo/a durante la infancia?
  • 27 de mayo: “Pero yo he venido para que las ovejas tengan Vida, y la tengan en abundancia”, dice Jesús. (Juan 10,10) Todavía estamos en el tiempo de Pascua, celebrando la alegría de la Resurrección. ¿De qué manera puedes dejar que Jesús resucitado renueve tu corazón y tu matrimonio?
  • 28 de mayo: Cuando te levantes por la mañana, piensa en algo que puedas hacer para mejorar el día de tu pareja. Puede ser grande y especial o pequeño y útil.
  • 29 de mayo: “Jesús les dijo de nuevo: «¡La paz esté con ustedes! Como el Padre me envió a mí, yo también los envío a ustedes» Al decirles esto, sopló sobre ellos y añadió «Reciban al Espíritu Santo (Juan 20,21-22)”. Hoy es la fiesta de Pentecostés, cuando el Espíritu Santo vino e inundó de su amor a la Iglesia primitiva. El Espíritu Santo está presente en la Iglesia y en nuestras vidas. Pide al Espíritu que habite siempre en tu hogar.
  • 30 de mayo: “Vayan, y hagan que todos los pueblos sean mis discípulos, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo” (Mt 28,19). Estamos llamados a llevar a otros a Cristo. Reflexionen sobre como su matrimonio vive este llamado siendo testigos del amor de Cristo.